simpática, sincera, honesta, sencillacon un cinismo encantador, que no hacía daño a nadie,
esa pequeña que todo el día sonreía,
cuando el vaso era medio lleno y no vacío;
con la compañía indicada, con la soledad necesaria,
las lágrimas eran contadas en momentos exactos,
los sonidos eran gratos,
los olores absorbentes
los caminos largos y frescos
la compañía el mejor amigo...
Todo cambia...